Creciendo en el Camino

En todo el tiempo que estuvimos trabajando en las playas de Salinas conocimos innumerable cantidad de personas oriundos de Cuenca, todos nos hablaban maravillas del lugar por lo que llegamos allí con muchísimas expectativas.

Nos estacionamos en el Parque Paraíso, un lugar enorme rodeado de verde e ideal para pasar una tarde en familia.

Parque Paraíso

La ciudad está atravesada por 4 ríos, el Tomebamba es el más pintoresco, lo cruzan un sinfín de puentes y tiene en toda su extensión un bello parque en sus laderas.

Uno de los tantos bellos puentes

El centro histórico de la ciudad está catalogado por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad por la armonía que guarda con su entorno geográfico y la particular arquitectura colonial que reina en el lugar.

Caminando por el centro

Es ideal para caminar y perderse por sus calles y sobre todo detenerse en cada esquina y mirar hacia arriba las increíbles construcciones que hay.

Sin palabras

Solo el centro cuenta con  más de 10 importantes iglesias donde se destacan la Catedral de la Inmaculada Concepción ubicada en el parque Calderón, Las Conceptas y Carmen de la Asunción entre otras.

La catedral de Cuenca

Además la ciudad de Cuenca se caracteriza por tener una enorme y variada cantidad de restaurantes y bares, todos ellos muy pintorescos y coloridos.

Otro indo lugar que uno no se puede perder es el mirador de Turi. Está ubicado a lo alto de un cerro y regala una visa panorámica de toda la ciudad. Es ideal para llevarse en nuestro caso el termo y el mate para pasar una linda tarde y esperar como de a poco se va oscureciendo el cielo e iluminando la ciudad.

Mirador de Turi

A solo 30 kilómetros de la urbe se encuentra el Parque Nacional Cajas. Está formado por grandes montañas que guardan en su interior en forma de cajas diversas lagunas que están interconectadas entre sí. De ahí sale el nombre del parque.

Las lagunas de lo alto

A lo largo de toda la ruta que atraviesa el parque hay distintos restaurantes que ofrecen pesca deportiva. Consiste en pescar tu propio pez en una pileta enorme, para ello te proveen del equipo necesario y una vez que sacas el pescado lo pesan, o cocinan y te lo sirven para degustarlo. En nuestro caso optamos por pedir el plato directamente.

Degustando una rica trucha

El principal atractivo del parque es la laguna La Toreadora donde se puede realizar una caminata de 4 horas aproximadamente que recorre toda la circunferencia de la misma.

Laguna La Toreadora

Otro lugar que se destaca es el mirador de las Tres Cruces. Es la parte más alta del parque y donde se dividen las aguas que van hacia el Pacifico y el Atlántico a través del Amazonas.

Cuenta la historia acerca de algunos viajeros que transitaban por el lugar y que morían por el intenso frio. Era tradición de todo caminante el rezar un Padre Nuestro en memoria de las almas de los difuntos y en señal de haberlo hecho colocaban una piedra al pie de las cruces a manera de reverencia y protección durante el resto de la travesía.

Mirador Tres Cruces

Para recorrer el camino hay que tener máxima precaución ya que siempre en alguna parte hay nubes que hacen dificultosa la visibilidad. No fuimos la excepción y tuvimos que sufrir un poco el recorrido.

Atravesando las nubes

Igualmente esto hace que en algunos puntos sea muy pintoresco para tomar muchas fotografías ya que uno se siente volando sobre las nubes.

Posando sobre las nubes

Sobrepaso totalmente las expectativas que llevábamos a estos dos grandes lugares, definitivamente son lugares a conocer si uno viene para estos lares.

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