Valle del Colca, un paraíso profundo.

Saliendo de Arequipa y recorriendo un camino serpenteante (donde se llegan a los 4950 metros de altura en el mirador de los andes) llegamos a la ciudad de Chivay, puerta del valle del Colca.

Juntos en el mirador de los Andes

La ciudad de Chivay es un poblado muy lindo y tranquilo para pasear, se destaca la vista al impresionante y siempre humeante volcán Sabancay.

Volcán Sabancay

Toda la zona está llena de terrazas de irrigación que se usan para cultivo de papas, maíz, habas y quinua entre otros. Resulta una imagen muy pintoresca para retratar.

Las famosas terrazas

Camino al cañón del Colca nos encontramos con el poblado de Maca y su imponente iglesia.

Iglesia de Maca

El cañón se hace notar, el camino va por encima del mismo y las vistas que se generan son impagables.

Sin palabras

Llegamos de noche al cañón por lo que tuvimos el placer de acampar en solitario con el ruido del viento que solo nos hacía compañía.

Acampando en el Colca

El cañón tiene una profundidad de más de 4 kilómetros, esto lo convierte en uno de los más profundos del mundo.

El gran cañón

El majestuoso vuelo del cóndor andino se puede observar en su máximo esplendor por la mañana donde el aire caliente sube por el cañón y estas inmensas aves lo utilizan para ascender y planear. Es impresionante el tamaño que tienen y pasan volando por al lado de uno. Este es considerado uno de los mejores lugares del mundo para observarlos hacer bellas piruetas en el aire.

El cóndor andino

Un dato a tener en cuenta para todos aquellos que viajan en sus vehículos o carros, es que luego de mediodía el lugar queda vacío por el resto de la jornada, por la mañana es inmensa la cantidad de gente que pasa por el lugar. Nosotros nos quedamos a pasar la tarde allí por lo que pudimos recorrer nuevamente cada uno de los miradores con tranquilidad y con toda esa inmensidad solo para nosotros.