Fundada en el año 1511, la ciudad de Baracoa es el asentamiento más antiguo de toda la isla, por esto se lo conoce como la “Ciudad Primada” por lo que no podíamos dejar de visitarla.
Nos encontrábamos en la ciudad de Santiago de Cuba, por lo que nos separaban más de 200 km del destino. Luego de mucho averiguar teníamos dos opciones para ir, una era en un taxi compartido que costaba exactamente lo mismo que la segunda que era el bus que corresponde a turistas, el Via Azul, por lo que optamos por este último ya que nos asegurábamos llegar a destino. El mismo lo tomamos en la terminal del ferrocarril y nos costó 15 CUC por persona, tardo unas 5 horas pasando a muy pocos kilómetros de la base militar estadounidense de Guantánamo, de la cual en el camino escuchamos cientos de historias.
También atravesamos el Viaducto de la Farola el cual cuenta con 11 puentes voladizos y para el cual requirieron de un gran ingenio debido a la atrasada tecnología del país.
Ni bien llegamos a la ciudad nos dirigimos a alojarnos a una casa de familia que nos habían recomendado, la cual nos recibió de la mejor manera y con quienes compartimos muy lindos momentos.
Casa de Sr Pedro Ruiz Lemus
Calle Republica # 27 entre calle Moncada y Abel Díaz.
Teléfono fijo 21642548
Teléfono móvil 54298282
Costo 15 Cuc por noche la habitación para 3 personas.
A primera vista nos encontramos con una ciudad mucho más pequeña de lo que imaginábamos, súper tranquila y extremadamente colonial.
Esta ciudad se encuentra a orillas del mar y tiene una enorme bahía que regala unos hermosos atardeceres.
Toda la zona está llena de paradisíacas playas a las que lamentablemente no pudimos ir por el cuidado del ojo de mamá que se encontraba recién operada, pero de las cuales todos nos hablaron sumamente bien.
En toda la isla de Cuba usar internet es todo una aventura, recién ahora está llegando el internet móvil por lo que para poder hacerlo hay que comprar una tarjeta en alguna de las distintas casetas de ETECSA, la empresa de telefonía, y para hacerlo hay que presentar una identificación. Estas tarjetas son por tiempo y valen 1 Cuc la hora, hay desde 1 y hasta 10 horas. También hay gente que las revende pero de esta forma son mucho más costosas.
Para poder usarla hay que ubicar una red de wifi, generalmente en todos los parques de las ciudades hay y te vas a dar cuenta por la cantidad de personas con celular en mano que vas a ver.
Una vez que te conectas a la red esta te va a pedir que ingreses un numero de usuario y su clave los cuales están en la tarjeta que compraste. Una vez que entras empieza a correr el tiempo y hay que tener mucha tranquilidad ya que es súper lento.
Los proveedores de internet usan licencias muy antiguas por lo que tuvimos bastantes problemas para usar nuestro teléfono, por ejemplo el navegador de Chrome directamente no aceptaba la licencia por lo que tuvimos que instalar otro navegador y muchas paginas no se pueden abrir por este mismo tema.
A lo largo de toda la ciudad hay un hermoso e interminable malecón para pasear disfrutando del aroma del mar y deleitarse con unas hermosas vistas.
En este último se encuentra una enorme escultura al descubridor de América el cual estuvo en la zona en su primer viaje.
Dentro de la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción se conserva La Cruz de la Parra, símbolo de la cristiandad, esta es la única que queda de las 29 cruces que planto Cristóbal Colon en su primer viaje, la misma la clavo en la Bahía de Baracoa y es considerada la reliquia religiosa más antigua del encuentro entre las culturas europea y americana.
A la hora del atardecer disfrutamos mucho de subir hasta el hotel Castillo del cual obtuvimos unas vistas increíbles de toda la ciudad y la bahía.
También se puede caminar hasta la desembocadura del río Miel por la orilla de la playa cosa que dejamos para otra oportunidad por el poco tiempo que estuvimos en la ciudad pero sin lugar a dudas fueron dos noches maravillosas llenas de tranquilidad y descanso luego de tantos días ajetreados de recorrer, caminar y viajar muchos kilómetros a lo largo de toda la isla. Desde este punto emprendimos el lento regreso hacia La Habana parando y conociendo un montón de lugares en el medio, pero eso quedara para la próxima. Un gran abrazo y muchas gracias por leernos.
Para ver más fotos de nuestro paso por Baracoa podes hacerlo acá.